Acerca de mi

     Tengo 42 años, una mujer maravillosa y dos hijos. Durante la mayor parte de mi vida me dedique a ahorrar y hacer depósitos con lo que podía ir ahorrando. Alguna vez había hecho incursiones en el mundo de la bolsa pero con poca fortuna y consistencia. A veces perdía dinero y otras ganaba, pero en general solo me proporcionaba nervios, alguna alegría y varios disgustos, pero rentabilidad real cero. 

    No terminaba de tener una estrategia consistente. Finalmente con la crisis de 2009 terminé de quedarme bastante pillado al comprar muchas acciones de Iberdrola y Banco Santander, pensando que lo peor ya había pasado. Del tremendo error terminé por salir gracias a la paciencia (y noches sin dormir), debido a la recuperación en bolsa de ambos valores también mi cartera recuperó y deje de estar pillado, eso me costo varios años para luego estar igual que al principio y no haber ganado nada. Esta cara lección me abrió los ojos: al final con tiempo, paciencia y perseverancia es posible que a largo plazo se ganase en este mundillo, siempre que se diversifique no solo en empresas si no en el tiempo.

   Empecé a descubrir foros de inversores gracias a Internet y de ahí salte a blogs como DonDividendo que me abrieron los ojos, compré un par de libros y empecé a sentar las bases de mi actual estrategia, por entonces ya era el año 2013 y contaba 37 años. En aquellos entonces todavía los depósitos bancarios constituían mas del 70% de mis ahorros. 

    En 2014 había leído 'El inversor inteligente', un libro de Benjamin Graham muy recomendable, me daba ánimos a seguir aumentando mi cartera y mi diversificación. Para el 2015 desembarqué en una nueva área: la compra de pisos con vistas al alquiler. Desde entonces hasta ahora ya no he vuelto a realizar depósitos bancarios y solo invierto los ahorros en acciones e inmobiliario. 

  El objetivo que me anima a seguir invirtiendo en empresas cotizadas es conseguir algún día la independencia financiera, es decir que mis ingresos mediante rentas (dividendos o alquileres) puedan ser suficientes para no depender de un salario sobre el que no tenemos ningún control. Pero tampoco me voy a engañar, tal y como esta el mundo, otro gran motivo que me impulsa en este objetivo es poder dejar una cartera de acciones o de inmuebles a mis hijos podría ayudarles en el futuro tan incierto que tienen hoy en día, es mi mayor motivación.

   Este es mi diario personal acerca de mi camino por conseguir algún día a esa independencia.